Pues sí, como reza el título, ayer despedimos el verano lúdico con una partida para novatos al República de Roma, que jugamos en el local de Valkyria a partir de las 18:00. Los senadores en liza fuimos Enrique, Guillermo, Pedro, Paco, Víctor (que ya había jugado una vez) y un servidor, que hacía de maestro de ceremonias.
Atardecer en la República
Al ser una partida de novatos, jugamos nuevamente con el mazo de la República temprana, y hay que decir que fue la partida más puñetera de las 5 o 6 que habré jugado con este mazo.Salieron eventos y guerras a punta pala, y los dados tampoco acompañaron al luchar las guerras:
- Primer turno: Escasez de hombres; pasamos de reclutar y dejarnos los cuartos.
- Segundo turno: No pasa nada, pero nos dedicamos a mamonear un poco.
- Tercer turno: Sale la Segunda Guerra Púnica, que pasa a inminentes y nos activa la primera inmediatamente. Al luchar contra ella (con un +8 a la tirada) superamos la batalla naval, y caímos en la terrestre por 1 puto punto! 1!!!
- Cuarto turno: Guerras ilíricas, macedonias... el ciento y una madre. Fuimos a rematar la púnica con Escipión y tuvo que salir el 12, número mágico de Amílcar, con lo que al tener más de 4 guerras activas, nos fuímos al carajo más pronto que tarde ;-)
Los Julios de Pedro; casi derrotando la I guerra púnica en un sólo envite
A pesar de que Roma no aguantó demasiado, la verdad es que la partida fue muy divertida, y tuvo momentos realmente tensos. Entre los mejores, una epidemia en Roma que se cepillo a todos los senadores gordos; mira que había patatas que podrían haber muerto tranquilamente, pero no, de 15 de influencia para arriba (menuda manita Paco!). En ese mismo turno nos dedicamos a mamonear durante un buen rato sobre el reparto de concesiones (que al palmar varios senadores, estaba el foro rellenito); si hubiera seguido la partida, auguro puñaladas varias, porque el reparto final no fue nada equitativo ;-)
Tensión: todo el mundo jugando de pie
Los novatos coincieron en su opinión sobre el juego: abunda el azar por todas partes, pero realmente es un juego en el que no te importa. Es verdad que te da un resquemor así curioso cuando se te muere un senador por la puñetera cara en la fase de muerte (sobre todo después de ganar la batalla naval de la I guerra púnica ¿verdad, Pedro? ;-p, pero si sabes desde el principio a que estás jugando, no hay problema. Yo la verdad es que me divierto mucho jugándolo, maquinando alianzas, deshaciéndolas, metiendo puñaladas y recibiendo represalias. ;-)
Y con esto como digo, terminamos el veranito (no me voy a quejar, la verdad); a partir de la semana que viene ya volvemos a horario normal y esas cosas. Supongo que tendremos la habitual sesión de juego semanal, pero por si las moscas, tenemos preparada alguna cosilla extra...
Muchas gracias al anfitrión, Enrique; siempre da gusto jugar por Valkyria :-)
Saludos!